Colocar suelo laminado

Al colocar primero esta lámina, protegerá el suelo contra los efectos de la humedad. Es una práctica muy recomendable si va a colocar el laminado sobre un suelo de hormigón nuevo.


Colocar el laminado mediante el sistema clic
Coloque la primera fila de placas empezando por el lado izquierdo con la ranura a lo largo de la pared. Incline el extremo del laminado ligeramente hacia arriba y colóquelo en su sitio de manera que haga clic.

Compruebe si la primera fila de placas ha quedado recta. De existir alguna diferencia en el hueco entre las placas y la pared, puede corregirla con cuñas o bloques separadores.

Asegúrese de que los extremos de las placas quedan bien unidos y hacen clic golpeándolos suavemente con un taco. Si al final de una fila de placas no tiene espacio suficiente para ello, use la barra de tracción de manera que la última placa quede colocada en su sitio y haga clic.

Si utiliza una sierra de mano de dientes finos, coloque la placa con la superficie superior hacia arriba.
Si utiliza una sierra de calar o circular, coloque la placa con la superficie superior hacia abajo.

El suelo laminado puede contraerse o dilatarse a consecuencia de los cambios de temperatura ambiente y humedad. Teniendo esto en cuenta, deje un hueco de unos 8 mm en todo el perímetro del suelo. Utilizando dos cuñas o bloques separadores, podrá ajustar fácilmente este hueco y ajustarlo a cada una de las paredes.

Empiece la siguiente fila de placas con la pieza restante de la fila anterior. Debe tener más de 40 cm de longitud. Para que el suelo terminado quede más bonito, asegúrese de que todas las piezas restantes tengan la misma longitud. Así conseguirá un aspecto más regular y desperdiciará menos material. Si prefiere un efecto más informal, puede optar por un patrón irregular.

Tras colocar unas 8 filas de placas, el suelo quedará lo suficientemente unido como para poner una fila de varias placas juntas. Incline toda la fila ligeramente hacia arriba y únala a la anterior de manera que haga clic. Resulta más fácil hacerlo si le ayuda otra persona.

Al colocar la última fila de placas, es probable que tenga que serrar las placas a lo largo. La forma más fácil de hacerlo es poner la última placa exactamente encima de la penúltima fila con la superficie superior hacia abajo. A continuación, coloque los bloques separadores de 8 mm a lo largo de la pared, ponga una nueva placa contra los bloques separadores y utilice el borde de esta placa para marcar la línea de corte en la parte inferior de la última placa situada debajo. A continuación, podrá serrar la placa a la anchura correcta. Asegúrese de que la ranura queda en el lado correcto.

En el umbral puede utilizar perfiles de remate especiales que sirvan de transición entre el suelo laminado y otros tipos de suelo, como moqueta o vinilo. Primero, coloque el riel de fijación en el suelo y luego coloque encima el zócalo asegurándose de que haga clic. También puede comprar tiras que se ajustan directamente al suelo, pero en ese caso los tornillos de fijación quedarán visibles. Existen rosetas especiales con colores a juego para cubrir los agujeros de las tuberías de calefacción centralizada.

Puede fijar los zócalos con adhesivo de construcción o con clips (si utiliza zócalos huecos). Los zócalos huecos pueden utilizarse para ocultar cables de electricidad o de Internet.

Con una sierra de ingletes puede cortar los zócalos limpiamente a medida y a un ángulo de exactamente 45°. También puede utilizar una sierra de mano junto con una ingletadora. Por supuesto, también puede serrar los zócalos a 90° y rematar los extremos con perfiles de PVC de un color a juego.

Si ha recortado el marco de una puerta para meter debajo el suelo laminado, no podrá inclinar el laminado para encajarlo con la siguiente placa. Este problema puede resolverse limando la parte elevada de la lengüeta sobresaliente (ver segunda ilustración más abajo). A continuación, podrá introducir la lengüeta en la ranura correspondiente sin necesidad de inclinar las piezas y esperar a que hagan clic.